
©Pedro García Lorente: Pájaro en Mano
Quejumbre
___________________________
Nadie se percata de la tórrida presencia
Gesto que saquea y desordena
Nada colma la oquedad
de las nupcias-nunca-consagradas
la agitación dolorosa de los partos
las hambres y sus guerras
Nunca reaparece la inocencia imprudente
oculta en las líneas de mis manos
velada por todos los errores cometidos
desde tempranas inconsciencias
(cuántos años ¿? cuántas vivencias
configuran la luz de la consciencia)
Mi habitación está fría y yo -sin embargo-
hiervo a cuarenta grados
sudo y vomito
Purgo así mis pecados incontables
de pájaro ciego – pájaro errante – pájaro sediento
Nadie escucha el seco rumor del hartazgo
ni siquiera yo misma
que ya no importa
que es solo el temor
infantil y nocturno agudizado
Por cada lámpara apagada
una alucinación me persigue:
Solo distingo mi sombra de rota marioneta
__________________________________________________
©Rosa María Ramos: Cronología de la Fatiga
Tu poema es un conjunto de versos muy coherentes entre sí, y con su título y el título del conjunto. Quejumbre y fatiga. Comparto esa fatiga y el temor cuando se va la luz. Que ahora desaparece en tantos sitios. Me parece un poema muy logrado, que tiene la belleza que el dolor a veces tiene cuando se acierta con su expresión.
Gracias querida María, amiga, por tan hermoso comentario.
Los miedos nos persiguen !!
La angustia de lo que fue y de lo que serà
Es un sentir de todo lo que hemos vivido
En esa oscuridad siempre esta una luz
Nos levanta y nos fortalece
El dolor expresado con belleza. Hermosísima reflexión.
Así es, Poli. Buscar belleza en la herida. Un abrazo. Y gracias mil por seguir pasando por aquí.